
Según un papiro encontrado en Egipto del 2 800 a.C. se arrestó a un conductor de carros que conduciendo borracho chocó contra una estatua de la diosa Athor. Encontrándole culpable se le colgó de la puerta de la taberna donde le vendieron la cerveza, hasta que los animales carroñeros acabaron con él.
Este es el primer accidente registrado provocado por un estado de embriaguez.
Que la cerveza es una de las bebidas más consumidas en la actualidad ya lo sabemos, y que hace muchos años que se elabora, también. Pero muchos son los que ignoran que en la Antigüedad era elaborada por sacerdotisas o que la cerveza sin alcohol no es un descubrimiento del siglo XX sino mucho más antiguo. Los egipcios seguidores de la diosa Hathor, calentaban recipientes llenos de cerveza a los pies de la estatua de la diosa para que al evaporarse el alcohol ascendiera pasando por la cabeza de la divinidad mostrándose así más receptiva a las peticiones de sus fieles. Después, el líquido que sobraba lo vendían para recaudar fondos para la conservación del templo.
Es una de las bebidas fermentadas más antiguas y su historia se remonta a los tiempos del descubrimiento de la agricultura (Neolítico). Las primeras plantas que se cultivaron eran los cereales (trigo y cebada) y cuando el hombre se vio en la necesidad de dar salida a los excedentes de grano que no eran consumidos, para evitar que se estropearan y perdieran, fue cuando se ideó su fabricación para poder conservarlos.

La primera referencia escrita -en cuneiforme- la encontramos en una tablilla de arcilla sumeria del 2050 a. C. y en ella se define como una bebida fermentada de los granos de cereales denominada siraku, en la que se describe su elaboración, añadiendo que ponía a la gente «alegre, extrovertida y feliz». La receta más antigua en Europa data de hace 3000 años y se encontró entre los restos de un poblado de Lérida en España llamado Genó. En tiempos del rey Hammurabi se reguló su precio, la concentración que debía tener y las sanciones que aplicarían si la adulteraban.
Según los historiadores ya existía en Mesopotamia 5000 años antes y algunos antropólogos se aventuran en decir que miles de años atrás, tras masticar raíces de cereales silvestres y al añadirles saliva, desencadenaban la fermentación de los azúcares obteniendo una bebida ligeramente alcohólica. La primera evidencia de dicha fermentación la encontramos en el antiguo Egipto correspondiente a la época predinástica (5500-3100 a. C.) pasando a considerarse como bebida-alimento, fuente de calorías y alimento básico para la mayoría de la población junto con el pan, difundiéndose su empleo en muchas de las recetas médicas de la época.

Por el historiador griego Estrabón sabemos de su consumo en Alejandría, mezclándola con frutos -sobre todo dátiles- para endulzarla, miel y canela para perfumarla. Egipto, como gran productor de cereales, la dio a conocer a otras culturas emergentes y después, tanto griegos como romanos la difundieron durante sus conquistas, aunque era considerada una bebida (brytos) del pueblo llano mientras que el vino era más consumido por las clases altas. Por Plinio sabemos que en España se la conocía con el nombre de celia, el pueblo bárbaro de los astures, zhythos, y en la Galia cerevisia. En las Provincias donde el clima no favorecía el cultivo de la vid como el norte de Europa era donde más se consumió la cerveza y el hidromiel (miel fermentada). Encontramos los primeros barriles de cerveza en el año 100 d. C. utilizados por algunas tribus germánicas.
Llegamos por fin a la Edad Media (ya habréis visto que el origen de esta bebida es muy anterior a ella) siendo en los monasterios donde se acabaría de perfeccionar (cerevisa monacorum) gracias al uso del lúpulo (más agradable en sabor y que permitía mejorar su conservación), pero siempre secretamente, al igual que la Coca-Cola de nuestros tiempos. Será cerca de estas abadías donde se comenzará a comerciar con ella. En 1290 se dicta un decreto en Nuremberg en el que se prohibía el uso de cualquier otra sustancia que no fuera la cebada para su elaboración. Los gremios de cerveceros aparecen durante el siglo XIV mejorándose aún más su sabor al añadir romero y tomillo. Aparecen las primeras grandes fábricas de cerveza durante los siglos XIV y XVI y desde este momento su sabor nada tendrá que ver con la que se consumía siglos atrás. En el siglo XV, holandeses y mercaderes de Flandes popularizan el uso del lúpulo (Humulus lupulus L.) que le daría su sabor amargo denominándose «cerveza tipo lager«, para diferenciarla del «ale«, que carecía de él. El rey Carlos I autoriza a Alfonso de Herrera en 1542 producirla «en las Indias y en tierra firme del mar Océano», aunque en México ya existían algunas bebidas muy similares como el tesguino y el sendecho. En el continente americano la fermentación del maíz proporcionaba la bebida conocida como chicha, que acabó convirtiéndose en un alimento consumido a diario, así como utilizado en rituales religiosos. Las primeras cerveceras del continente americano las crearon ingleses y holandeses en Nueva Amsterdam y Virginia.
La cerveza ha sido uno de los primeros alimentos industrializados y a partir del siglo XVIII todas las cervezas serán fabricadas con el lúpulo apareciendo en 1840 las primeras escuelas cerveceras. Durante las primeras décadas del siglo XX se consigue el cultivo de las levaduras fermentativas pasando a producirse a escala industrial y convirtiéndose entonces en esa bebida alcohólica tan consumida a nivel mundial.
Un video divertido: ¡No dejéis de verlo!
Para saber más:
Historia de la cerveza en España
Links imágenes:
Rob Boudon; Jim Kuhn-takomabibelo; E. Michael Smith Chiefio
Información basada en Wikipedia
muy listo!
Hola John,
…y muy etílico. ¡Ja, ja, ja!
Un saludo
Reblogueó esto en #DandoValorALasCosas.
Muy interesante artículo. Me encanta la cerveza, con mesura por supuesto, uno de los más grandes placeres que hay en la vida es ese primer trago bien frío cuando uno tiene sed, y más ahora con los rigores del verano. Un saludo, Francisco.
Hola Jose,
sin lugar a dudas el mejor invento de la historia de la humanidad es la cerveza. Bueno, la rueda también pero no va tan bien con la pizza. ¡Ja, ja, ja! Como diría un amigo con pancha cervecera: ¡Vivan los tanques, pero de cerveza!
Un saludo cervecero.
Pero que interesante!!!!! Sabía lo de los egipcios, pero nada sobre su fbricación y todo lo que explicas del resto el mundo. Que buen lo del egipcio que estaba beodo!!!! Eso no me pasará a mi, soy un especimen raro… ni me gusta.
Como siempre felicidades… un abrazo.
Hola Rosa,
el alcohol y las borracheras que conllevan son tan antiguas como la vida misma. A este egipcio le salió bien cara su embriaguez pero lo que también es seguro que muchas otras cogorzas se verían antes aunque no quedaran registradas. Ahora, te hacen una foto y quedas inmortalizado además de ponerte una multa (siempre es mejor a que te cuelguen de un palo). En cuanto a que no te guste la cerveza no te preocupes, es algo de lo más normal y ahora diré algo más científico. Las papilas gustativas de la lengua y el cómo percibimos los distintos sabores cambia con los años. Queda demostrado que el amargo en los niños no se percibe igual que en vida adulto. Esto demostraría que a los niños tampoco les gusten las verduras. ¡Ja, ja, ja!
Un abrazo
Jeje… gracias me tratas comi una niña????? pues sería una niña muy rara,,, ya tengo espolones (es un dicho muy antiguo.) Un besito…
A la diosa, primero una cerveza y luego las peticiones, como debe ser.
Hola madame,
mejor sería que nos tomáramos nosotros la cerveza a la salud de la diosa, seguro que nos inspiraríamos mejor después en las peticiones.
Un saludo
Claro, claro… Bien mirado… 🙂
Las olas fermentadas me llevaron por rumbos conocidos degustando unas «chelas». Cañas acompañadas de unas tapas, viendo el mundial. Gracias por lo histórico. Un saludo, embriagado con sabor amistoso.
Hola Marimbeta,
no conocía el nombre de «chela». He buscado y si la información que he encontrado no está equivocada, chela es el nombre que recibe la cerveza sobre todo en Perú, aunque también se le puede llamar así a alguien que se llame Isabel. Permíteme que aproveche tu comentario para explicar de dónde viene el nombre de «tapa». Se dice que proviene de andalucía donde los dueños de los bares y mesones acompañaban la cerveza que servían (también el vino, claro) con sus olivitas, jamoncito, pan…. Con el calor del verano no era extraño que las moscas y mosquitos acudieran raudos al vaso. Para evitar esta molesta visita se acostumbraba a tapar las copas y los vasos con el platito «alimenticio» en cuestión.
Por cierto, la cerveza no engorda pero sí la «tapa» que la acompaña. 😉
Otro saludo embriagadito y recuerda: «cuida el agua tomando una cerveza».
¡Qué rica la cerveza…! De las mejores bebidas, sobre todo con estas temperaturas…
Si se aplicara ahora el mismo castigo que al que se chocó con el carro contra la estatua de la diosa, seguro que habría menos accidentes por consumo de alcohol… ¡Se lo tomaban en serio entonces, eh…!
Saludos.
Hola Juan Ignacio,
seguro que sí, pero… ¿quién sería el primer candidato a recibir ese castigo?
Un saludo. Es curioso como el tema de la cerveza nos ha llevado a todos en la misma dirección… ¡ja, ja, ja! Supongo que el tema da pie a ello 😉
Reblogueó esto en ale.
Un poco bestias los egipcios con el accidente 🙂
Interesante historia la de la cerveza, un manjar en toda regla en épocas de calor, días de esos de tomarte dos, una de un trago y la otra ya degustándola en condiciones 🙂
Hola Dess,
dadme un punto de apoyo… y me beberé otra cerveza. ¿O no era así?
😉
Un abrazo
Se me hace agua la boca. Brindemos con ella, por ella. 😀
Hola Verónica,
me uno a tu brindis.
Un saludo
Jeje, menuda bebida, siempre he dicho yo que es digna de los dioses. Me encantó este artículo Francisco, y no sólo por el tema, sino por la manera en que nis cuentas la relación tan cercana entre hombre y cerveza. Existe un punto de vista que a mí siempre me ha llamado la atención, y es que algunos arqueólogos y antropólogos creen que la cerveza está muy ligada a la civilización humana, tanto, que puede ser la responsable de que exista. Según ellos, y les creo, el hecho de que para hacer cerveza tuvieran que hervir el agua, ayudó a que sus consumidores estuviesen menos expuestos a enfermedades que los que bebían agua sin hervir, lo que tuvo un enorme impacto en el aumento de las expectativas de vida, y por ende, de la población.
Muchas gracias por la exposición, brindaré por ella…
Un afectuosos saludo.
Hola Jesús,
dices bien, además en el artículo ya comento que en el Antiguo Egipto correspondiente a la época predinástica la cerveza era una «bebida-alimento» pues la consumían no ya tanto por placer sino para obtener las calorías necesarias para su trabajo diario.
Un abrazo
Estoy de acuerdo con eso de que es bebida y alimento, y creo que los monjes trapistas también lo están…;)
Lo sabía, FJT, empezaron las sacerdotisas para hechizar a propios y extraños.
Bromas a parte, un magnífico artículo. Es, para mi, como volver a la escuela. Gracias.
Hola Enrique,
espero que la próxima cerveza que tomes te recuerde este post y la disfrutes doblemente.
Un abrazo
Una cerveza belga de abadía de doble fermentación… 😀
Hola Hesperetusa,
… y triple e incluso cuádruple fermentación. Así se aumentaba el cuerpo y el grado. En ellas se puede ver que son más turbias a la vista y tienen sedimentos en su fondo. A más carga de cebada malteada, más intensidad de sabor, llegando a alcanzar incluso los 10 grados.
Pocas bebidas a lo largo de la Historia ha sido tan estudiada y experimentada como la cerveza. Gracias a ello podemos disfrutarla en la actualidad en todas sus formas y para todos los gustos. Un placer 😉
Un abrazo
Un artículo donde se puede decir que: la mejor y deliciosa rubia, se llama Pilsen. Hay otra más exclusiva que se llama Stella «Stella Artois» es una combinación de la palabra latina para «estrella» (Stella) y el nombre del fundador de la cervecería.
Una pena no tengo relación con el fundador.
Hasta pronto.
Stella.
Hola Stella,
pues realmente es una pena que no tengas relación con el fundador… tendrías cerveza gratis de por vida. ¡Ja, ja, ja! Fuera bromas y siguiendo el hilo del comentario de Hesperetusa, pocas bebidas hay que tengan tanta variedad en su forma y en sus nombres. Podría hacerse una enciclopedia sobre ello.
Un saludo
Reblogueó esto en yofumoenpipa.
No volveré a quejarme cuando me pongan una multa de tráfico… aunque las mías son por exceso de velocidad.
¡Excelente post! Hay que celebrarlo… con UNA cervecita… (o DOS). No más… aunque las merezca. 😉
Hola Paco,
si es que nos quejamos por nada. Se acababa rápido lo de conducir borracho si se implantara este castigo egipcio, aunque pensándolo bien, creo que todos los bares, supermercados y bodegas del país tendrían a más de uno colgado en su puerta. Faltaría cuerda para tanto borracho.
Un abrazo lento, lento… muy pausado.
Hola Javier, muy interesante. Yo sabía que en Egipto se consumía la cerveza hace miles de años, pero ignoraba lo de Mesopotamia, leyéndote me entero de muchas cosas, gracias, un abrazo
Hola Silvia,
me alegro habértelo dado a conocer. Lo de asociar la cerveza al Antiguo Egipto y a la Edad Media es bastante común, pero quizás no lo es tanto lo otro.
Un abrazo grande para ti.
Reblogueó esto en De por aquí y de por alláy comentado:
Para acompañar la comida y el actual fútbol 🙂
Hola Francisco, realmente sorprendente todo sobre la popular cerveza. Muy ad hoc para la temporada futbolística. Me permití pasarlo a mi blog porque la cerveza va de maravilla con la comida mexicana. Un saludos desde Múnich, ¡salud! — Tonantzin
Hola Tonantizin,
no lo pensé cuando colgué el post pero es cierto. Fútbol y cerveza en mano, buena combinación. Gracias por el reblogueo y espero que guste a todos tus seguidores.
Un saludo también para ti.
Reblogueó esto en Ramrock's Blog.
Enjoy beer, but like the higher class, prefer wine! 🙂
Hi Shelley,
a good wine or a good beer, what if enjoyed in good company.
Best regards
Muy refrescante, historiada y amena entrada: siempre veo datos nuevos para mí. Gracias y un buen abrazo.
Creo que apropiado para empezar este caluroso verano. ¡Cuántas buenas conversaciones se habrán hecho entre amigos alrededor de una buena cerveza!
Un abrazo también para ti.
Apropiado, sí, con que por aquí me llegue un poquito de calor, je, je… y muy gustoso lo segundo, sin duda. 🙂
«fue cuando se ideó su fabricación para poder conservarlos.» -> ¿No sería su «fermentación»?
Hola Profesor Frink,
gracias por comentar. En este caso me refiero a la fabricación en sí.
Un saludo.
Reblogueó esto en PaKmAnBlog.
Muy ambicioso el artículo para tan breve texto. Muchas pinceladas y anécdotas que lo hacen ameno pero con un hilo muy débil y que no profundiza en nada. Hay algunos errores, como la diferencia entre lager y ale que dices que es por el uso o no de lúpulo. O las referencias a los primeros restos de cerveza en el mundo y en España. No resolveré yo este problema pues es faena del periodista antes de escribirlo. Ale, a corregirlo. 😉
Sensacionalista total, me ha defraudado bastante.
Hola Oriol,
antes de nada agradecer que te pasaras por el blog y comentaras el post de hoy y decirte que no soy periodista ni tampoco pretendo ser sensacionalista. Este solo es un blog que quiere explicar/acercar la Historia de la manera más objetiva, general y amena posible, sin tampoco pretender profundizar en el tema en concreto (para eso hay otros blogs que seguro encontrarás más adecuados que este). Siento que no encontraras lo que buscabas en el artículo pero espero que al menos lo encontraras ameno al leerlo.
Un saludo.
A mi lo de las burbujas, siempre me han parecido inmoral, con lo que fui un auténtico profeta del desastre de la «Inmovil Burbuja» ¿O no es eso? Con lo que prefiero los vinos, a ser posible tintos. Las cervezas y demás brebajes burbujantes fomentan una serie de sonidos y olores no muy gratos para la pituitaria. Con lo que a el cava y a su primo de una franca provincia, nunca les he cogido el chiste. Y no soy capaza de diferenciar la cerveza de un tipo de la de otro, si los grados de alcohol, eso es evidente. ¿Para cuando nos escribirás sobre Fernando el Caótico y la mosca común?
Hola Eulalio,
todo a su debido tiempo, todo a su debido tiempo. Hay tantas cosas por explicar… 😉
Un abrazo.
No hay tiempo debido, o todo lo es. Recuerda «Sic transit gloria mundi».
Reblogueó esto en El sitio de Bimbá.