Dice un proverbio gitano que detrás de la mala suerte viene la buena, y de eso saben mucho los gitanos, muestra de esa buenaventura la encontramos en el cuadro de arriba del pintor valenciano Juan Antonio Benlliure Gil. Lejos de prejuicios, el pueblo gitano forma parte de nuestra cultura en muchos aspectos de la vida, y si no, quién no ha utilizado las palabras mola, catear, pirarse, chungo, napia -de origen caló reconocido- para describir lo que es de nuestro agrado, al suspender un examen, al querer largarse, al referirnos a algo que nos da malas vibraciones o para aludir a nuestro apéndice nasal.
Se desconoce el origen del pueblo gitano (rom) debido en parte a que no se han conservado documentos escritos que lo acrediten. Descendientes de Caín, magos caldeos de Siria, ladrones de los clavos de Cristo –que explicaría que erraran por todo el mundo a modo de condena-, todas, leyendas fantasiosas que no han hecho otra cosa que abrir más interrogantes que respuestas. Puede que la creencia -también errónea- más generalizada sea la que sitúa su procedencia en Egipto, de hecho, el término “gitano” podría derivar de egiptano aludiendo a dicho origen. La región que ocupaban allí era conocida como “el pequeño Egipto”, y los peregrinos que la atravesaban para dirigirse a Tierra Santa extenderían por Europa dicho término. Después, muchos grupos de gitanos se presentaron como “nobles egipcianos”, ejemplo de ello lo encontramos cuando en 1425, dos romaníes se hicieron llamar “condes del Egipto Menor” para que el rey Juan II de Aragón les concediera un salvoconducto.
«Anar, star e passar» a»nuestro amado y devoto don Johan de Egipto Menor», que circula con su permiso, para que sea»bien tratado y acogido».
Será el idioma y la genética las que aportarán las pistas que se necesitan para encontrar su origen. El romaní, propio de los gitanos, es un idioma índico muy similar al hindi occidental hablado en el noroeste del subcontinente indio, probablemente de la región del Panyab, algo que ya se apuntaba a finales del siglo XVIII. Posteriormente, estudios genéticos del ADN mitocondrial han confirmado que los gitanos europeos y la población de Asia del Sur y Central comparten parte significativa de su contenido cromosómico. Se desconocen los motivos de su emigración, puede que pertenecieran a una casta inferior reclutada y enviada a luchar al oeste o que fueran esclavizados por los musulmanes, pero en lo que coinciden la mayoría de expertos es en decir que abandonaron la India hacia el año 1000. Se desconoce también la puerta de entrada a la península ibérica, unos especulan que atravesaron el estrecho de Gibraltar y otros que vinieron de Francia, aunque ambas bien pudieron coexistir.
Las primeras referencias escritas se encuentran cuatro siglos después, de hecho, el pueblo gitano nunca se preocuparía de dejar por escrito su propia historia, y es la vía de entrada del norte la que mejor se documenta. El primer documento conservado es de 1415 y corresponde a un salvoconducto a Tomás Sabba otorgado por el rey Alfonso V de Aragón «el Magnánimo» solicitado para poder peregrinar a Santiago de Compostela.
Por aquel entonces, unos 3000 gitanos vivían en la península viajando en grupos de 80 y 150 personas dedicándose al espectáculo y a la adivinación, vistos con simpatía al principio, pero el sentimiento gitano de libertad y su negación a ser vasallos de los señores feudales, provocaría que a inicios del XVI comenzaran a ser perseguidos y expulsados, surgiendo disposiciones reales como esta de los Reyes Católicos:
Los egipcianos y caldereros extranjeros, durante los sesenta días siguientes al pregón, tomen asiento en los lugares y sirvan a los señores que les den lo que hubieren menester y no vaguen juntos por los Reinos: o que al cabo de sesenta días salgan de España, si no pena de cien azotes y destierro la primera vez y que les corten las orejas y los tornen a desterrar la segunda vez que fueren hallados.

O esta otra posterior del rey Felipe IV:
Y mandamos a todos los justicias, que teniendo noticia de que andan gitanos en su partido o salteadores, se reúnan todos y con la prevención necesaria de gentes, perros y armas, los cerquen, prendan o maten, y si los prendieren, a los gitanos y gitanas que, por algunas causas justas, no merecieren pena de muerte ni galeras, queden esclavos por toda la vida.
Colón embarcaría en su tercer viaje a cuatro gitanos, los primeros en llegar a América, y con el paso del tiempo las leyes terminarían por discriminarlos e incluso esclavizarlos, provocando su marcha hacia el oeste. Las oleadas migratorias continuarían en los siglos posteriores hasta el comienzo de la Primera Gran Guerra y sobre todo durante la Segunda Guerra Mundial en la que su persecución se endurecería.
Es el último tercio del siglo pasado que el pueblo gitano volverá a tomar conciencia de él mismo creándose asociaciones y movimientos unificadores, pero eso no evitará que a partir de 1989 las circunstancias económicas y políticas ocasionen una nueva diáspora de este a oeste. Actualmente, del total de la población europea nueve millones son gitanos, de los que dos millones viven en Rumanía. Muchos de los que viven en España lo hacen en Extremadura y Andalucía.
Su lengua, sus leyes, sus costumbres y su expresión artística conforman una cultura diferente, que, a pesar de ser única, está influida por el resto de la cultura española así como también esta se influye por la gitana. Su folclore con su afición al cante y al baile, origen del actual cante jondo, y su protagonismo en algunas obras de la literatura como La gitanilla de Cervantes o La vuelta de Egipto, de Lope de Vega, son una pequeña muestra de ello.
Para saber más:
«Images de la femme gitane au Siècle d’Or» de Araceli Guillaume-Alonso.
Links imágenes:
Información basada en Wikipedia
Hola Francisco, excelente artículo, como todos los tuyos. Conozco personas de etnia gitana aquí en mi país, una que conozco me dijo que ellos llegaron desde España a principios del siglo XX, ¡en un barco construído por ellos mismos! No sé si será cierto o no, me imagino que tal vez leyendas… Tienen unos apellidos muy específicos, aquí usan el apellido Santiago, algunos se apellidan Candanedo… Según me contó esta conocida mía… Un hermano mío que visitó Roma hace algunos años, me dijo que unas gitanas le sacaron la billetera del bolsillo, y los carabinieri se la recuperaron tras darle a las ladronas una buena tunda de palos… Supongo que pertenecen a la tradición «picaresca» de las historias que leemos en clases del «Buscón». Saludos!
Hola Hermelo,
la comunidad gitana tiene a sus espaldas una cultura milenaria ignorada por la gran mayoría de personas. Su estructura social, sus sistema de valores y su propio idioma conforman dicha cultura. Al igual que con otros colectivos, los estereotipos hacen que generalicemos cuando en realidad entre ellos existen gran diversidad.
Saludos y como siempre agradecido por contar con tus comentarios.
https://www.youtube.com/watch?v=HIpTHelAsDE una historia muy ligada a la de mi pueblo y a la de nuestro pais en general . tambien su representacion teatral en mi pueblo la tiene . https://www.youtube.com/watch?v=2wG3UcO95uQ a veces creo que con el lenguaje se pasan
quien conozca mi pueblo su historia sabra bien de que hablo
Muy buenos tus videos. Vale destacar que también están los gitanos en Latinoamérica.
Sí, de hecho según la ONG Etnias de Colombia calculan en 1,5 millones de gitanos los que viven en América Latina siendo en Brasil donde hay una de las mayores comunidades (cerca de un millón) así como en Argentina y Colombia.
Hola Carlos,
sin duda alguna y mi intención con este artículo ha sido el de darla a conocer. De una manera u otra, durante siglos hemos convivido todos juntos.
Saludos y gracias por los enlaces.
Muy interesante Francisco. Aquí también hay, en nuestra provincia la Familia más conocida es de apellido Costich. Saludos
Hola Poupée,
creo que aquí son Fernández, Jiménez, Heredia, Cortés… La mayoría adoptados por los gitanos en el bautismo y por matrimonios mixtos, algunos de origen español que se han ido asociando con la minoría gitana.
Saludos
Recordar más que olvidar. «Cara de Gitana», de cabellos negros rodando por sus pechos, cantaba Daniel Magán, disco de diamante. Otro la abrazaba otro la besaba…¿»A quién mirabas»? ¡Destino! : ¿Vagar? Ah,¿»Dónde andarás amor»? Caminos. Vivencias… «Esa canción que dejó de cantar» Será que «Es más fácil despedirme que olvidarte»? Hay que emborracharse para quererte más todavía… para que vengas más de prisa. Gracias, FJ, por hacernos cantar de manera apasionada. Abrazos, cantados.
Hola marimbeta,
qué mejor para contestar a tus palabras que ver, oír y sentir a Joaquín Cortes en su arte.
Abrazos de Festival Calé
Muchas gracias.
😉
Hermoso documento…..pues mira yo soy mexicano pero creeme que admiro mucho la cultura gitana, me gustaria saber mas de su historia, mas de su vida todo en general, desde que tengan uso de memoria desde lo mas remoto y lo mas antiguo de su historia gracias…
Hola Ángel,
aunque dejo abierto tu comentario para que cualquiera pueda aportar más datos al respecto, a mí siempre me llamó la atención el rol social que han tenido los varones en su entorno y la importancia de la edad en él. Así, el hombre casado, es conocido como «Bató», responsable de la familia; cualquier muchacho u hombre con capacidad de luchar, como «Vara»; al gitano de edad que, por sus años, poder y manera de comportarse impone respeto al resto, «Tío»; y al cabeza visible de una familia numerosa, «Patriaca». No obstante, este no tiene un poder absoluto, sino que en él se asienta la autoridad moral y el respeto que el gitano siente por sus mayores.
La mujer tiene un papel más secundario pero no menos importante al descansar en ella los valores culturares como el cuidado de la familia. Ellas están subordinadas a sus padres y a sus hermanos cuando están solteras, y una vez casadas, a su marido.
Sin embargo, en los últimos años la mujer ha pasado a convertirse en impulsora de la transformación y el cambio gitano de la comunidad y muestra de ello es que aunque son muy pocos los gitanos que actualmente llegan a la Universidad, ocho de cada diez titulados son mujeres.
Un saludo y gracias por comentar.
Hola Francisco, en el ejercicio de mi profesión he tratado a muchos gitanos. Los apellidos Clavería, Jimenez, Heredia, Gabarre.. han sido pacientes míos y de ellos tengo regalos de todas clases, cuadros, vestidos para mi esposa, chándals a gogó para mis hijos, estatuillas antiguas, juegos de escritorio de plata, capiteles de piedra de sabe dios que monumentos. Conozco a sus patriarcas (o matriarcas, la Rona es una de las más famosas aquí), y es ejemplar su sentido de «la familia»: cuando uno de ellos está enfermo, viene al hospital TODA su familia a verle y eso que la mayor parte de ellos vive del comercio ambulante. Era inútil tratar de que estuviera el paciente tranquilo en su cama, entraban de 6 en 6 o más y ¡cuidadín, que faltase alguno que sabían y tenían encuenta quien NO habia venido! Te podría contar un sinfin anécdotas de ellos y con ellos. Anaranía (o sea Amén final del Gloriapatri en caló, que me lo sé: Chimuclaní ar Bató, chimuclaní ar chabá, chimuclani ar Janisperó Manjaró…)
unas cuantas palabras que utilizamos a diario y tienen origen caló o calé http://tienecajones.com/2014/11/palabras-procedentes-del-calo-romano-vocabulario-gitano/ a mi la que me gusta es FETÉN
¡Qué bueno! Si es que las hemos utilizado día sí y día también (y lo seguimos haciendo).
😉
Hola Javier, qué interesante, como siempre, aprendiendo de ti. Acá en México, se le llama «caló» al argot o forma de hablar de delincuentes de los barros bajos, que se ha extendido a la clase media, sobre todo a los jóvenes. Un ejemplo:
Ya chole chango chilango “ya basta hermano Chilango (de la Ciudad de México)”
Qué chafa chamba te chutas “qué trabajo tan malo te toca hacer”
No checa andar de tacuche “y no es bueno, como para que andes de traje”
Y chale con la charola. “te ves mal con esa placa de policía” o «deja de fastidiar con tu placa de policía»
o
Que milanesas que no te había bisteces: «qué milagro, no te había visto»
pensé que ya te habías morongas: «pensé que ya te habías muerto»
Como ves, nada que ver con los gitanos, pero acá se le llama «caló» o «caliche», hasta ahora me entero que es de origen romaní.
Abrazos de luz
Hola Silvia,
de lo que no hay duda es del frecuente uso de la «ch». Como siempre interesante y curioso aporte.
Abrazos de Luz
Sí, casi todas las palabras co «ch»
Gracias Javier, abrazos de luz
De una parte siempre me llamó la atención los lazos familiares tan fuertes que siempre tienen mostrado los gitanos, se unen ante cualquier contratiempo y, por otra, su falta de voluntad de adaptarse a los tiempos modernos.
En muchos aspectos parece que viviesen muchos, pero muchos años atrás.
Saludos, Juan.
P.D.: ¿Por qué no pones un enlace directo a tu libro en Amazon en el texto que así lo indica debajo de la imagen del mismo?
Hola Juan,
era algo que tenía pensado hacer (me refiero a lo del enlace en Amazon) y aprovecho que me lo recordaste para incluirlo. ¡Dicho y hecho!
Saludos 😉
Reverencio, respeto y admiro al pueblo gitano. Gracias por este post. 🙂
Hola Carmen,
espero que sirva para acercar un poquito su cultura, ya que no son invisibles, están aquí entre nosotros y en la diversidad está el enriquecimiento de los pueblos.
Un saludo y gracias por tu amable comentario.
A mí me encanta el cante jondo. No puedo dejar de pensar en Esmeralda de la película de Disney, El jorobado de Notre Dame. Pienso que es un pueblo admirable.
Hola melbag,
si te lo paras a pensar y a escuchar como merece, pone los pelos de punta. Encontré este fotograma de la película del Jorobado de Notre Dame de 1923
Besotes
Es un canto doloroso y sí, pone los pelos de punta. Besotes a ti también.
Con el permiso de Carlos Fernández añado este comentario que me pareció muy interesante acerca del primer documento sobre la llegada de los gitanos a España, lo transcribo…
«Efectivamente, fue el 12 de enero de 1425 cuando el Rey de Aragón, Alfonso V el Magnánimo, estando en Zaragoza, otorgó a Juan, gitano, Duque de Egipto Menor, un salvoconducto que le autorizaba a viajar libremente por el país en su peregrinación a Santiago de Compostela.
Aunque la historia documentada del pueblo gitano empieza a principios del siglo XIV, con un documento fechado en 1302, conservado en la isla de Corfú, lo cierto es que se tiene conocimiento de nuestros orígenes indios gracias a Mahmud de Ghazni quien en el siglo XI toma prisioneros a más de 50.000 habitantes procedentes, entre otros territorios, del Sindh y del Punjab al norte de la India. Estos prisioneros optan por la libertad e inician su gran éxodo hacia Occidente que culmina, como hemos dicho, en España en 1425.
Tardaron 300 años en atravesar los territorios que les separaban de Europa. Pasaron por lo que hoy es Afganistán, Irán, Armenia y Turquía hasta desembocar en Grecia, de donde, entre otras muchas palabras, tomamos la forma de contar. Curiosamente nuestros gitanos no lo saben, pero cuando contamos lo hacemos en griego antiguo.
Fue durante el siglo XV cuando la presencia gitana en Europa fue del todo patente. En 1416 ya estaban en Rumanía, en Bohemia (Chequia) y en Lindau (Alemania). Fue precisamente el rey Segismundo de Bohemia el que les extendió un salvoconducto que fue muy prolijamente utilizado por los gitanos de entonces para circular por todas partes. De ahí que también se nos haya llamado, especialmente en las composiciones literarias, como “bohemios”. Entre 1418 y 1419 ya se ven gitanos en Suecia y en Francia. En Bruselas y en Flandes aparecen en 1420 y ese mismo año acudieron a Bolonia para pedirle al Papa un salvoconducto que les acreditara como peregrinos cristianos que acudían en penitencia a los más importantes santuarios. En 1415 ya están en Perpiñán (Francia) y en 1425 en Zaragoza.
El documento mediante el cual el Rey Alfonso V el Magnánimo autoriza a Juan, Duque de Egipto Menor (es decir, la actual Turquía, que así se llamó en la antigüedad) a peregrinar a Santiago de Compostela puede ser visionado en su versión original escrito en catalán antiguo, así como en castellano y en inglés en el enlace que dejo más abajo.
Los primeros gitanos que llegaron a España en el primer tercio del siglo XV fueron bien tratados y bien acogidos por los habitantes de la península, hasta que los Reyes Católicos firmaron en 1499 la terrible Pragmática que redactó el Cardenal Cisneros condenándonos a terribles martirios. Pragmáticas, leyes y disposiciones que han sido una constante contra nuestro Pueblo hasta que, gracias a la nueva democracia española se puso fin a tanta ignominia cuando logré, en 1978, que el Congreso de los Diputados, en mi primera intervención parlamentaria, votara favorablemente la desaparición de tres nefastos artículos del Reglamento de la Guardia Civil donde se nos daba un trato absolutamente discriminatorio.
Y a partir de ahí comienza una nueva historia de nuestro Pueblo en España».
Leer aquí la transcripción literal del documento (unionromani.org)
Hola Francisco, sinelas caló? Me parece un acierto dar visibilidad de forma seria al Pueblo Gitano. Pretendemos Gitanizar el Mundo es nuestro blog, pues eso pretendemos. Un saludo
Hola Nicolas,
así lo pretendí aunque sea modestamente con este post.
Saludos y gracias por tu comentario.
En nuestro blog hablamos intensamente del temablog, por si quieres pasarte. Salud y Libertad! https://gitanizate.wordpress.com
Seguro que sí, muchas gracias por el enlace e invito a todo aquél que quiera saber algo más que entre.
Mil gracias!
Reitero nuestro agradecimiento
FJT: amigo, observa el torrente de comentarios y aportaciones que te ha dado el tema «Gypsy», no puede haber duda de que forman una parte importante de nuestro patrimonio histórico aunque se mantuviesen al mínimo sus matrimonios mixtos
Hola astolgus,
sí, forma parte de nuestra cultura, de eso no hay la mínima duda, se adaptan y enriquecen, al tiempo que influyen en la cultura general de nuestro país. especialmente en Andalucía y Extremadura. A pesar de que no hay libros escritos sí tienen películas como Alma gitana y el Lute, siempre interesantes de ver.
Un saludo
Chimuclaní ar Bató, chimuclani ar Chavá, chimuclaní ar Janisperó Manjaró sina acná y del tó, sosque chiró al presimelo, a seclos per o secles, Anaranía. Esto lo aprendí de viva voz de unos gitanos pacientes míos por eso me temo que la ortografía no sea muy correcta. Apareció uno primero y tras él vino toda la familia, por cierto uno de los chiquillos era rubio y de ojos azules absolutamente sajón. Un día vinieron con una «fregoneta» y dentro un capitel de piedra de alguna iglesia o ermita y otro día con un cuadro de naturaleza muerta colgado boca abajo. Nos invitaron a una boda gitana con exhibición de pañuelo manchado de sangre virginal (?). Para rematar la cosa me coge uno de ellos aparte y me dice hablando muy bajito: «dotor», si alguien le molesta o comporta mal con usted nos lo dice y le «arreglamos» una piernica con escayola… Tenían un puesto en el mercadillo semanal con toda clase de falsificaciones de relojes, de zapatillas Adidas, batas de noche para mi esposa que pasaban directamente al ropero de una parroquia cercana. Por supuesto, jamás vi un euro de pago por mi trabajo médico.
¡Eres un crack!
El cuadro es de Juan Antonio Benlliure, no de su hermano José
Hola Alberto,
ciertamente se me hizo difícil encontrar si el cuadro en cuestión (magnífico por otra parte) es obra de José o su hermano Juan Antonio. Aunque me inclino a pensar que tienes toda la razón así que lo modificaré en el texto. No obstante, si tuvieras más información al respecto te agradecería que la compartieras con todos nosotros. Dejo este link para quien quiera admirar otras obras de Juan Antonio.
Un saludo y gracias por el apunte.